Abrazar cada momento como si fuera un regalo es la clave para encontrar la verdadera felicidad.
Explicación
La felicidad se construye a partir de momentos pequeños y sencillos, aquellos que pasan desapercibidos pero que en su conjunto, tejen el tapiz de nuestras vidas. Encontrar placer en el café de la mañana, la risa compartida con amigos, o el abrazo cálido de un ser querido, son ejemplos de cómo las pequeñas cosas tienen el poder de iluminar nuestros días.